Se presentan resultados parciales de una investigación de corte empírico sobre el proceso de trabajo docente en educación primaria de la Ciudad de México. Se entiende el proceso de trabajo como el despliegue de las capacidades intelectuales y físicas de los docentes para llevar a cabo las responsabilidades, tareas y actividades de manera sucesiva y simultánea en distintas fases, horarios y en condiciones materiales específicas (CTERA, 2009; González, 2012). La propuesta metodológica que acompaña esta comunicación retoma el planteamiento de Marx (s/f) “sobre los factores simples que intervienen en el proceso de trabajo: la actividad adecuada a un fin, o sea, el propio trabajo, su objeto y sus medios” (p. 126). Mediante entrevistas semiestructuradas con cinco docentes de educación básica, se identificó que los docentes realizan actividades vinculadas con la enseñanza, una que va más allá de los contenidos disciplinares. La disciplina, seguridad e integridad de los estudiantes demandan acciones de vigilancia y supervisión constantes y permanentes. El proceso de trabajo se extiende más allá de la escuela, se realiza en condiciones precarias dadas las jornadas laborales extensivas e intensivas, las cuales se desarrollan en tiempos superiores a los contratados y pagados.