La revisión de planes de estudios y su modificación nunca resultaron sencillos, pero esto se ha agudizado y complejizado en las últimas décadas y aún más con posterioridad a la pandemia de Covid 19. Poder generar una propuesta de cambio de índole participativa e investigativa, que recoja las voces de estudiantes, formadoras/es, docentes y funcionarias/os del sistema educativo, en el marco de la autonomía universitaria, implica abrir canales de diálogo en distintas instancias y momentos a lo largo del proceso y atender las múltiples demandas con respecto al perfil de las/os docentes a formar, sus conocimientos, actitudes, habilidades, entre otras. Desde aproximadamente 2016 estamos trabajando y al mismo tiempo investigando en una reforma curricular de los Profesorados de Educación Inicial y de Educación Primaria de la Universidad Nacional del Sur (UNS). Los planes de estudios vigentes datan de 2009 (es decir posteriores a la Ley de Educación Nacional 26.206/06), pero cuentan con una estructura y cantidad de materias que vuelven muy complejas las trayectorias de las/os estudiantes, al tiempo que fragmentan en exceso los contenidos de enseñanza y de aprendizaje. Aquí presentamos algunos elementos del análisis -a manera de tensiones y problemas-, que venimos observando a medida que se avanza en la construcción de nuevos planes de estudios. Estos han surgido, fundamentalmente, de las múltiples fuentes de información que hemos recogido en reuniones, entrevistas y cuestionarios, y que nos vienen implicando un trabajo de reflexión, búsqueda y generación de alternativas curriculares.